La Reserva de la Biosfera El Vizcaíno se localiza en la parte media de la Península de Baja California. Es una de las Áreas Naturales Protegidas más grandes de México que cuenta con alrededor de 400 km de línea de costa sobre el litoral del Océano Pacífico.
La costa occidental de El Vizcaíno se caracteriza por sus extensas planicies. Algunas de éstas se encuentran a escasos centímetros por encima del nivel medio del mar, lo que las convierte en áreas altamente susceptibles a los efectos del cambio climático. Es por ello que en los últimos meses COSTASALVAJE ha enfocado esfuerzos para identificar los riesgos y necesidades de las comunidades costeras más vulnerables de la Reserva de la Biosfera frente a esta amenaza climática.
Recientemente realizamos un tercer taller de Adaptación al Cambio Climático en las comunidades costeras de El Cardón-La Escuelita. Durante esta sesión contamos con la participación de alrededor de 37 habitantes, entre ellos pescadores, amas de casa, profesores y una nutrida asistencia de estudiantes de nivel bachillerato. El objetivo del taller fue identificar de manera participativa las principales amenazas que los habitantes de estas comunidades costeras identifican como parte de los efectos del Cambio Climático, así como cuáles son las medidas o estrategias de mitigación que están implementando o proyectan realizar a futuro para reducir sus impactos.
Estas comunidades costeras, conformada en su mayoría por habitantes dedicados a la pesca y servicios turísticos, asentados sobre extensas planicies de la rivera de Laguna San Ignacio, mencionaron que en la región en la que habitan se empiezan a sentir los efectos del Cambio Climático, siendo las inundaciones recurrentes generadas por el incrementos del nivel del mar y recurrentes mareas altas. Asimismo, han notado modificaciones en la línea de costa que han llegado a afectar algunos sitios de uso pesquero.
En este taller, se observan amenazas similares a las registradas en talleres anteriores, donde la disminución de la producción de especies comerciales de pesca, asociadas al incremento en la temperatura de las aguas marinas circundantes, es de alta preocupación. La pérdida de la cobertura del manglar que resguarda las costas de la porción sur de la Laguna San Ignacio, es igual una preocupación mayor para los habitantes de estas comunidades costeras ya que saben que entre los servicios ecosistémicos que brindan está la crianza y alimentación de especies comerciales, protección de las costas y de sus viviendas.
Conscientes del medio en el que habitan, presentaron propuestas concretas para atender las amenazas. Reconocen la importancia de contar con un plan de evacuación e incluso, un plan de reubicación o construcción de casa habitación en zonas altas, es decir, reubicar los asentamientos humanos hacia áreas alejadas de arroyos y esteros. Identificaron también la necesidad de la construcción y mantenimiento de infraestructura de comunicación adaptada para resistir el paso de arroyos que crecen considerablemente con las lluvias torrenciales generadas por los huracanes que llegan a alcanzar la costa occindental de la Reserva de la Biosfera, y que impactan algunos tramos de las rutas de acceso a las comunidades, es decir, proponen la construcción de puentes sobre los cauces de arroyos.
Con estos ejercicios participativos, COSTASALVAJE busca conocer los riesgos y necesidades de las comunidades costeras y en conjunto con ellas, impulsar la búsqueda e identificación de alternativas para hacer frente al Cambio Climático, reduciendo los riesgos para sus habitantes, pero al mismo tiempo, promoviendo la conservación de los ecosistemas costeros y marinos y de la vida silvestre que en ellos habita.
Agradecemos la participación abierta y entusiasta de pescadores, amas de casa, maestros, estudiantes y pobladores en general de las comunidades El Cardón y La Escuelita del Ejido Luís Echeverría. Gracias por continuar siendo una fuente de inspiración para nuestro equipo de trabajo.
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